Nos encontramos ante un local ya reformado, donde se han mantenido preexistencias de su antiguo uso, pero adaptándolo al nuevo uso comercial actual.
La propuesta, parte de la base de la unificación de los dos espacios con una misma línea de mobiliario.
Para el desarrollo de la propuesta partimos de varias premisas principales: la búsqueda de un espacio unificado, donde predomine el producto al mobiliario, la búsqueda de elementos diferenciadores que generen un foco de atención y la búsqueda de una calidez y naturalidad que genere un espacio acogedor.
Estas bases se traducen en la elección de una estructura metálica ligera, que unifique todo el conjunto de la propuesta y que permita la correcta visualización de las prendas de vestir, un mostrador exento, donde la materialidad se vuelve más pétrea y la colocación de diferentes bodegones repartidos en toda la superficie, donde se juega con la ambas premisas, la introducción de estructuras metálicas ligeras, con acabados pétreos y maderas, que combinado con distinta vegetación hacen del espacio una estancia agradable.